El primer superclásico del fútbol argentino

Curiosidades y anécdotas del primer partido oficial que jugaron Boca Juniors y River Plate.

El primer partido oficial entre los primeros equipos de Boca Juniors y River Plate se jugó el 24 de agosto de 1913 en el estadio del Racing Club, ubicado en Alsina y Colón de la ciudad de Avellaneda.



Desde el año anterior (1912), el fútbol porteño estaba dividido entre la tradicional Asociación Argentina de Football (AAF) y la escindida Federación Argentina de Football (FAF).



En 1912 el torneo de 1ª división de la AAF contó con sólo 6 equipos (Quilmes, CASI, Racing, Estudiantes, Belgrano y River). La AAF decidió que a partir de 1913 se sumaran los clubes de Intermedia (Ferro, Platense, Boca, E.Porteño, Comercio, Olivos, Riachuelo), más Banfield (campeón de 2ª) y Ferro Carril del Sur (invitado).



Fue el primer torneo de Boca en 1ª división (categoría que desde entonces mantuvo sin interrupciones). Como no tenía campo propio, jugó muchos de sus partidos de local en la cancha del Club de Estudiantes, en la esquina de Dorrego y Figueroa Alcorta en los bosques de Palermo.



El 13 de marzo de 1913 un ciclón dañó la primitiva cancha de River en la Dársena Sur. River jugó sus 6 primeros partidos del campeonato de visitante, y al finalizar el torneo fue desalojado por las autoridades del puerto. En 1914 jugó de local en la cancha de Ferro en Caballito.



A pesar de haber surgido en el mismo barrio, antes de 1913 los primeros equipos de River y Boca nunca se habían encontrado de manera oficial. River se afilió en 1905 y Boca en 1908. Ese año compartieron sin cruzarse el campeonato de 2ª, que ganó River y así obtuvo el ascenso a 1ª.



Cuando Boca y River se enfrentaron por primera vez, la tabla de posiciones era la siguiente. El torneo lo ganó Racing, que inició su extraordinaria seguidilla de 7 campeonatos de liga consecutivos (1913-1919) y puso término a la supremacía de los equipos de ascendencia británica.



Entre todos los clubes de 1ª división de la AAF, Racing tenía el estadio más importante, con capacidad para 10.000 espectadores. Un lateral y ambas cabeceras presentaban pequeñas tribunas de madera descubiertas, mientras que en el otro lateral se alineaban 3 tribunas techadas.


Las formaciones Boca y River fueron las siguientes. Cabe notar que el árbitro designado —Armando Bergalli— no se presentó y fue reemplazado por Paddy MacCarthy.

En Boca destacaban Pedro Bleo Fournol —el popular Calomino— en la punta derecha, y el insider oriental Ángel Romano, de muy destacada actuación en el fútbol de la vecina orilla (y eso que en esa época decían que los jugadores eran todos amateurs).



En River destacaban el arquero Carlos Isola (jugó más de 100 partidos entre 1912 y 1925), y el half Cándido García (jugo más de 300 partidos entre 1913 y 1926). Arthur Thompson era inglés, sólo jugó 3 partidos, se enroló en el ejercito británico, y murió en la Gran Guerra en 1916.



Armando Bergalli —el árbitro ausente— era Secretario Honorario de la AAF, y antes había sido jugador. Hasta 1911 se mantuvo en actividad como arquero de Estudiantil Porteño, Argentino de Quilmes y el Club de Estudiantes.



Paddy Mac Carthy era un irlandés llegado a Buenos Aires a fines del siglo XIX. Fue pionero del fútbol (jugó en Lobos Athletic y fue fundador del Club de Estudiantes), del atletismo, y también del boxeo (en 1903 ganó el que se considera fue el primer match profesional en la ciudad).



Mac Carthy fue instructor deportivo en el Escuela Superior de Comercio (el actual Colegio Carlos Pellegrini), a la que asistían E. Baglietto, S. Sana, y A. Scarpatti, tres de los fundadores de Boca en 1905. Se entiende así porque Boca jugaba en 1913 en la cancha de Estudiantes.



El partido de 1913 fue muy disputado. River tomó la delantera con goles marcados por García y Ameal. Luego se lesionó Garibaldi y Boca quedó con 10 jugadores. En el segundo tiempo descontó Mayer para los xeneizes y expulsaron a Ameal de River, pero el resultado no se modificó.
El diario La Mañana publicó una caricatura de Diógenes Taborda, en la que no obvió los elementos distintivos de esta fiera justa barrial. Los players destacados, el cambio de referís, el pesado ambiente que rodeó al encuentro y hasta el comisario de la zona.



En 1915 las Asociaciones volvieron a reunirse y River Plate retornó a la Dársena Sur. Allí inauguró un importante estadio para unos 10.000 espectadores en la manzana de Gaboto, Pinzón, Aristóbulo del Valle y Pedro de Mendoza.



En 1914 Boca Juniors construyó un estadio en Wilde. Su gente resistió la movida y el club perdió muchos socios. Volvió al pago en 1916, a un cancha ubicada en Ministro Brin y Sengüel, a sólo 3 cuadras del estadio de River en la Dársena Sur.



Entre 1913 y 1919 casi todos los encuentros entre River y Boca se jugaron lejos del barrio (5 en Racing en Avellaneda, 2 en Wilde, 1 en Caballito y 1 en Palermo). Sólo en 1919 River visitó la cancha de Boca en la Dársena Sur (pero ese campeonato se anuló).



En 1919 volvieron a escindirse las Asociaciones. Boca se quedó en la Asociación Argentina de Football (AAF), pero River se fue a la Asociación Amateurs de Football (AAmF). Durante los siguientes 8 años no se jugaron partidos entre River y Boca.



La reunificación recién se produjo en 1927. Boca Juniors ya era uno de los clubes más populares del país, y en 1924 había inaugurado un amplio estadio de madera en Brandsen y Del Crucero (donde hoy está la Bombonera).



River Plate había migrado en 1923 a Alvear y Tagle en la Recoleta. Allí construyó un importante estadio de madera, en un predio donde pudo desarrollar su estructura de club atlético integral que aún hoy lo distingue.



En 1927 Boca y River volvieron a cruzarse después de 8 años, en un partido que se jugó en La Boca. 


Recién en 1930 River recibió a Boca en Alvear y Tagle. Fue la primera vez que River jugó un partido con Boca en cancha propia (y el club ya aquilataba 29 años desde su fundación).



El blanqueo del profesionalismo en 1931 los vio enfrentarse en la cancha de Boca en un partido que no terminó. Desde la unificación de las Asociaciones en 1927 hasta 1966 (última temporada con un único torneo anual) se jugaron 41 campeonatos, de los que Boca ganó 11 y River 12.



Estos números explican cómo una supuesta rivalidad barrial (que en realidad nunca fue tal), creció y cobró alcance nacional hasta convertirse en uno de los clásicos más relevantes de todo el planeta futbolero.