Gimnasia y Esgrima La Plata

El Bosque (60 y 118)
Gimnasia y Esgrima La Plata fue fundado el 3 de junio de 1887, sólo 5 años después de la fundación de la capital de la Provincia de Buenos Aires.

En 1905 comenzó a jugar en la 3ª división de la Argentine Football Asociation. Disputó sus encuentros de local en una cancha ubicada en las calles 1 y 47. Cerca del final del torneo debió abandonarla y jugó sus últimos 5 partidos de local en la cancha del club Friends ubicada en las calles 51 y 20. Al finalizar el torneo Gimnasia abandonó la práctica del fútbol y dejó de promover las actividades al aire libre. Esta situación originó que un grupo de socios descontentos con la decisión fundara el club Estudiantes de La Plata.

Diario La Argentina del 1º de junio de 1905, que anunció el partido entre River (3) y GELP (2). En la revancha, jugada el 9 de julio de 1905, Gimnasia ganó 10 a 1.

Gimnasia retomó la práctica del fútbol en 1915 en la división intermedia de la Asociación Argentina de Football. Comenzó el campeonato como Club Independencia, con el que se había fusionado un breve tiempo atrás, y en donde desde 1914 actuaban jugadores provenientes de Estudiantes. Cuando la Asociación comprobó la regularidad de la fusión, continuó su participación como Gimnasia y Esgrima La Plata, ganó el torneo y obtuvo el ascenso a 1ª división. Fue local en la cancha del Club Independencia situada en el vivero del Bosque, entre el Observatorio Astronómico y la Avenida 60. Entre los años 1916 y 1923 jugó sus encuentros en la cancha del Club Ferrocarril Provincial, situada en la Avenida 72 y 12.

Campo de juego de GELP en 72 y 12 (circa 1916).

En 1923 comenzó a construir un estadio en un predio cedido por el gobierno de la provincia de Buenos Aires en el bosque platense (a pocos metros del que ocupaba Estudiantes desde 1907).

Croquis de ubicación del estadio de Gimnasia.

Los terrenos en los que Gimnasia construyó su estadio son los mismos en los que se encontraba el casco de la estancia de Martín Iraola, que fue expropiada para construir La Plata y cuya forestación original dio origen al Paseo del Bosque.

Casco de la estancia de Martín Iraola, que ocupaba los terrenos de Gimnasia (circa 1882).

El campo de juego contaba con un chalet que oficiaba de vestuario de los jugadores.
Primer partido (1ª división): 27 de abril de 1924. Gimnasia 3 - Est. Porteño 0.

Ingreso al campo de juego y chalet (circa 1924).

Vista del primitivo campo de juego y el chalet (circa 1924).

La inauguración oficial se demoró hasta noviembre, para hacerla coincidir con el 42º aniversario de la fundación de la ciudad de La Plata.
Partido inaugural: 19 de noviembre de 1924. Gimnasia 1 - Peñarol 0.

Ingreso al estadio el día de la inauguración (19 de noviembre de 1924).

Durante la etapa amateur, Gimnasia jugó en este estadio los partidos del campeonato que obtuvo en 1929, su único título en primera división (en el partido final derrotó 2 a 1 a Boca en el estadio que tenía River en Alvear y Tagle).

Portada del diario El Día (lunes 10 febrero de 1929).

GELP 7-2 Argentino de Banfield (21 de septiembre de 1930).

Último partido (amateur): 29 de marzo de 1931. Gimnasia 2 - Barracas Ctral. 0
Primer partido (profesional): 4 de junio de 1931. Gimnasia 3 - Boca Juniors 2.

Con la llegada del profesionalismo se ampliaron las instalaciones. En 1931 se construyó en cemento armado una importante tribuna techada para socios.

Construcción de la tribuna oficial (circa 1931).

Dirigentes frente a la tribuna oficial ya completada (circa 1931).

El resto de estadio se mantuvo con tribunas de tablones de madera.

Tribuna de madera contigua a la oficial (circa 1931).

Vista aérea (circa 1933).

En el predio se incorporaron además instalaciones para la práctica de otros deportes.

Pileta de natación y vestuario (circa 1931). Al fondo a la derecha se ve la tribuna oficial techada.

Pileta de natación (circa 1935).

En 1940 comenzaron a instalarse asientos en la tribuna oficial.

Vista del estadio, tribuna oficial (circa 1935). Nótese detrás de la tribuna el chalet.

Vista del estadio, tribuna popular (circa 1935).

Gimnasia 1-0 Boca Juniors (14 de abril de 1935).

Pileta de natación y tribuna oficial. El chalet ya no estaba (circa 1940).

El 11 de febrero de 1943 se inauguró el sistema de iluminación artificial, en un partido con Rosario Central al que concurrieron 20.000 personas.

Vista del estadio iluminado (circa 1943).

Entre 1952 y 1955 la ciudad de La Plata cambió su nombre por el de Eva Perón. Durante estos 3 años el club participó en los torneos de AFA con el nombre de Gimnasia y Esgrima de la Ciudad Eva Perón (en 1952 obtuvo el título de la 1ª división B).

GyE de la Ciudad de Eva Perón 4 - Colón 1 (28 de diciembre de 1952). Ascenso a 1ª división.

El 28 de mayo de 1959, durante la disputa del clásico con Estudiantes, la estructura de hierro que sostenía los tablones de la tribuna visitante cedió al festejarse de un gol. El accidente provocó dos muertos y numerosos heridos.

Derrumbe de la tribuna visitante (28 de mayo de 1959).

Gimnasia no ganó títulos oficiales regulares de primera división profesional en este estadio.

Vista general (circa 1960). Fotografía aportada por @centrojas.

En 1962 peleó el campeonato hasta las últimas fechas. Ese equipo finalizó tercero y recibió el mote de "El Lobo", que hoy identifica al club. Anterior es el mote de "Triperos", pues muchos de sus simpatizantes trabajaban en los frigoríficos radicados en la zona de Berisso y Ensenada vecina a La Plata.

Simpatizantes de Gimnasia camino al estadio de Independiente (4 de noviembre de 1962).

El 30 de enero de 1994, GELP ganó en este estadio la copa Centenario, un torneo oficial no regular organizado por la AFA. En la final derrotó 3 a 1 a River Plate.

En 1997 se inició la renovación de las tribunas populares. Se reemplazaron los tablones de madera por vigas de cemento armado y ampliaron las estructuras metálicas para darles mayor capacidad.

Sustitución de los tablones de madera por vigas de cemento armado (circa 1997).

Vigas de cemento armado en el estadio de Gimnasia (circa 1997).

Estructuras metálicas de las tribunas (circa 1997).

Al cabo de estas modificaciones la capacidad del estadio llegó a 32.000 espectadores.

Vista aérea (circa 2000).

Vista de la tribuna oficial y la cabecera local sobre la Av. Centenario (circa 2000).

Vista de la cabecera local sobre la Av. Centenario (circa 2000).

Vista de la cabecera visitante sobre 60 y 118 (circa 2000).

Desde 2006 hasta mediados de 2008 no se pudo utilizar el estadio para torneos oficiales, pues no cumplía con las normas de seguridad. Para rehabilitarlo se encararon obras básicas en las estructuras metálicas, se desmanteló la platea lateral opuesta a la tribuna oficial y re-acondicionaron todos los espacios del predio. La capacidad disminuyó a 18.500 espectadores. El 21 de junio de 2008 Gimnasia volvió a jugar en el estadio del bosque, en un encuentro oficial que perdió 2 a 1 frente a Lanús.

Vista general (circa 2008).

Vista de la cabecera sobre Av. Centenario y la tribuna desmontada (circa 2010).

Vista de la tribuna oficial y la cabecera sobre 60 y 118 (circa 2010).

Vista aérea (circa 2010).

Este video aéreo, filmado en 2014, muestra en detalle el estadio actual.

Gimnasia lanzó un proyecto para reconstruir la tribuna faltante (platea H) y remodelar todo el estadio.

La construcción comenzó el 28 de abril de 2015, día en el que se cumplieron 91 años del primer partido jugado en el Bosque.

Vista general (circa septiembre de 2015).

Vista desde el Bosque (circa septiembre de 2015).

Vista aérea (circa septiembre de 2015).

Proyecto de platea H (circa 2014).

El siguiente video muestra los alcances del proyecto de remodelación del estadio del Bosque.

Proyecto de estadio de Gimnasia y Esgrima (circa 2014).

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A fines de 1934, la redacción de la revista Caras y Caretas encomendó a Emilio Dudeló una serie de artículos sobre los orígenes de los 14 equipos de fútbol que ese año completaron el torneo de la Liga Argentina. Cabe notar que, en aquel tiempo, la mayoría de los clubes tenía menos de 30 años de antigüedad y varios de sus fundadores fueron entrevistados. No fue una tarea de investigación (hay datos errados), sino de compilación de lo que hasta ese momento sólo eran anécdotas que se transmitían por tradición oral. Con el tiempo, estos artículos se convirtieron en documentos esenciales que ayudaron a preservar la rica historia del fútbol en la Argentina.

Se transcribe a continuación el artículo completo correspondiente al Club de Gimnasia y Esgrima La Plata:
En este link podés descargar el PDF del artículo original con fotos.

Los "Mens sana" llaman los "hinchas a los jugadores del Club de Gimnasia y Esgrima de La Plata
Cinco años después de fundarse La Plata se funda este club. — Nadie quería fútbol en la institución, que debe su grandeza al popular deporte. — Sus fundadores lo crearon en 1887 para hacer gimnasia y hacer esgrima. — Nacimiento, muerte y resurrección del fútbol en Gimnasia y Esgrima. — La vuelta al mundo de los "Mens sana". — Un club de grandes jugadores.

"Mens sana in corpore sano"
"MENS sana in corpore sano", sonora cláusula latina, de rancia prosapia histórica, habla al espíritu con el dinamismo promisor de las ideas fuertes; tiene toda la robusta virilidad de la raza que le diera vida, y en el Panteón soberbio de la antigua Roma, reemplaza sin menoscabo al lema orgulloso de "urbi et orbe". "Mens sana in corpore sano"; tiene la fuerza evocativa de la falange de César, y en la ampulosa sonoridad de la frase, parecería hablar de la pompa de los doce Césares, de Scevola y de Lucrecia. Fue la concreción granítica de la ideología de toda una época; fue la expresión estilizada, valga la frase, de toda una robusta civilización; fórmula sintética de la recapitulación; frase eterna, que encerró, para siempre, la visión auspiciosa de una humanidad futura; fuerte de cuerpo, sana de espíritu. "Mens sana in corpore sano", latina en su forma, aunque de estirpe Griega; miradlo si no: Prometeo encadenado, encarnación sublime de vago ideal de perfección humana; y, más allá, miradla tocada su cabeza de áureo yelmo empuñando su égida bienhechora: es Minerva que preside la grandeza insuperable de la divina Atenas, hierática expresión del "mens sana" que propondría la posteridad romana. "Mens sana in corpore sano" es y será siempre la frase que agitan las avanzadas del progreso; la vocean las viriles juventudes de todos los pueblos que culminan en elíptica airosa su destino, y en la inmensidad de este grito auspicioso, se distingue el índice seguro de la vitalidad de los pueblos. Arriba, falanges "mens sana"; que el soplo divino de los grandes ideales presidan vuestra marcha victoriosa. A trabajar sin desfallecimientos y sin tregua; a trabajar, que el porvenir de la patria descansa en vuestra acción pujante.

Cinco años después de la fundación de La Plata
Y con esas o parecidas palabras, pues el texto auténtico del ardoroso discurso, se ha traspapelado y su recuerdo se ha perdido en la noche de los tiempos, Guillermo Pinto levantó el espíritu juvenil del grupo de mozos que la noche del 3 de junio de 1887 se reunieron en el célebre local de la vieja Sala Comercial de La Plata, y a los cinco años de haberse puesto la piedra fundamental de la ciudad, pusieron ellos, también la piedra fundamental del club que lleva el nombre que sirviera de origen a la institución: Club de Gimnasia y Esgrima. Tal fue la finalidad de aquel club. Hacer gimnasia y cultivar la esgrima. Tiempos eran aquellos en que la juventud porteña daba muestras de gran entusiasmo por la esgrima y se cultivaba con ardoroso frenesí la gimnasia en sus primitivos aspectos y no era extraño que aquella afición llegara a la capital de la Provincia donde un selecto grupo de hombres jóvenes se propuso implantar el culto a la gimnasia y a la esgrima, fundando al efecto un club con esos fines. En estas páginas se publica el acta, facsímil de la primera página del viejo libro de actas de la institución, que lleva como ya hemos dicho, la fecha del 3 de junio de 1887. La Plata se había fundado en el año 1882. Era pues, a los cinco años de aquella fecha histórica que, reunidos en la "Sala Comercial" lo más granado de la sociedad platense, daba el primer soplo de vida a una institución, tal vez la única, melliza, casi, de la hermosa ciudad y que ha crecido y progresado a la par de su hermana, la bella capital de la provincia, que fundara Dardo Rocha. ¿Quiénes se reunieron en aquella hora histórica para el deporte platense? Los jóvenes siguientes, cuyo nombre, salvo raras excepciones, se han destacado en nuestras letras, en nuestras artes, en la política, y está unido a importantes instituciones, a grandes hechos a sucesos trascendentales para el país. Eran ellos:

Los fundadores del Club de Gimnasia y Esgrima
IGNACIO D. Irigoyen, Julio Llanos, Juan M. Martínez, Santiago J. Mena, Alejandro Dillon, Manuel Piñeyro, F. V. Granel, Eugenio Siccardi, Adrían Díaz Olazábal, Arturo Silveyra, Benigno Canco, Pedro Olazábal, Pedro Bernatel, A. Ahumada, José María Minño, S. Perdriel, E. Landois, E. Ramírez, Faustino Alsina, Carlos M. Marenco, Guillermo Pintos, Martín Barcena, Enrique M. Curto, Francisco Alcobendas, Florencio Madero, M. Arauz, Alberto Alvarellos, Martín Bermejo, Marcos Brughuera, P. G. Gonzáles, Pedro C. Falcón, Estanislao López, M. Calandren, Juan B. Ferreyra, S. F. de Basaldua, Domingo Etcheverry, Alfonso Madero, José María Pene, Domingo Del Carril, José M. Ahumada, Sergio García Uriburo, V. E. Videla Dorna, Luis Monteverde, S. Monina, Diego J. Villafañe, Diego J. Arana, José de la Cuesta y algunos más, cuya firma se hace absolutamente ininteligible al pie del acta. En la esquina de las calles 5 y 54 se levantaba el local de la popular Sala del Comercio en la que tuvieron lugar, por aquel entonces, reuniones de toda índole, política, financiera, social y deportiva, como la que se realizó convocada por el entusiasta Guillermo Pinto, que, después de un "espiche" lleno de colorido y entusiasmo, convenció a los allí presentes de que era necesario fundar una institución en La Plata, que sirviera de punto de reunión a las familias de los asociados, pues su finalidad fue también de carácter social, y fuera el punto de cita de los hombres que quisieran vivir bajo el lema del club, que fue, desde esa noche, "Mens sana in corpore sano". Se discutió la idea y se aprobó casi por unanimidad la finalidad, que fue puramente la de hacer gimnasia y esgrima, quedando en consecuencia bautizado con ese nombre Club de Gimnasia y Esgrima, sin que ni por asomo la idea del fútbol pasara por la mente de los fundadores. De aquella asamblea salieron Ramón L. Falcón, Guillermo Pintos, Domingo Etcheverry y Julio Llanos, comisionados por los socios fundadores, que lo fueron todos los presentes, para confeccionar el proyecto de estatutos que debía aprobar la asamblea a realizarse siete días después.

Epítome del "Mens sana"
EL lema del flamante club, sirvió de mofa y dio motivo a las "chacotas" y bromas de todo el mundo, pues tanto se insistió entre los fundadores de la institución en que "Mens sana in corpore sano" debía ser el lema de todo buen ciudadano, que concluyeron por servir de risueño comentario en los diarios de la época, todos los actos de los "Mens sana", como se dio en llamar a los primeros socios del club. Es curioso que ese nombre que sirviera como de burla en la primera época de su fundación, sea el que hoy da la "hinchada" de los cuadros futbolísticos del Club de Gimnasia y Esgrima, a sus jugadores. Los "Mens sana" se reían a su vez de la gente, y perseveraban en su propaganda, llenando la ciudad de unos carteles que servían además para atraer adherentes a la flamante institución y en los que se reasumían los deberes del "Mens sana" dándole el carácter a los socios de verdaderos seres superiores, social, mental, física y patrióticamente. Más tarde ese verdadero epítome del "Mens sana" se amplió y hoy reza así:
1º Mantener y demostrar siempre un nivel de cultura superior.
2º Vigorizar sus músculos con el ejercicio metódico.
3º Fomentar noble emulación atlética y deportiva entre los asociados.
4º Estrechar vínculos de amistad y solidaridad social.
5º Difundir el prestigio de la institución.
6º Alentar a sus atletas.
7º Contribuir a la conservación y aumento de las comodidades sociales.
8º Colaborar en la formación de una juventud fuerte de cuerpo y sana y alegre de espíritu.
9º Demostrar que un "Mens sana", es cumplido caballero y correcto deportista.
10º Demostrar que practica la gran virtud de la "tolerancia".
11º Y demostrar que es siempre digno exponente de la honrosa tradición del Club de Gimnasia y Esgrima.

Esta institución, que como ya hemos dicho tuvo por única finalidad cultivar la gimnasia, para hacer hombres fuertes, sanos de cuerpo y alma, tuvo su segunda reunión en el mismo local el 22 de junio de 1887, es decir, a los 19 días de su fundación y en esa gran asamblea, en la que se había ya casi triplicado el número de socios, se eligió la primer comisión directiva que quedó así constituida: Presidente, Saturnino Perdriel, integrando la comisión Nicolás E. Videla, Ramón L. Falcón, Florencio Madero, Dante Palanda, Domingo Etcheverry, Guillermo Pintos, Teodoro V. Granel, Francisco Uzal, José María Niño, Luis Monteverde, Sergio García Uriburo, José María Pene, Antonio A. Delfino y Diego J. Arana.

Nadie pensó en el fútbol en la primera época
ALGUNOS años después de la fundación del Club de Gimnasia y Esgrima, que se había convertido en el centro social más importante de La Plata, pues el solo nombre de sus fundadores y de sus dirigentes atraía a toda la sociedad platense a sus fiestas y reuniones gimnásticas y asaltos de esgrima, surgió entre algunos socios la idea de dar un nuevo rumbo a la institución. Estaba en esa época en la presidencia el doctor Ricardo Guido Lavalle y a él se elevó el petitorio firmado por un grupo numeroso de socios jóvenes, pidiendo que se creara la sección fútbol. El deporte del fútbol era considerado entonces como un juego "de la calle". No se le daba categoría a un futbolista y salvo cultivarlo en los terrenos baldíos, ningún "niño bien" se dedicaba a jugar al fútbol. La proposición o solicitud, no encontró muy buena acogida en la comisión directiva, pero Guido Lavalle, que era hombre progresista y que tenía una gran visión del porvenir deportivo del país, no admitió la rotunda negativa y se dio a la tarea de convencer a los miembros de la comisión directiva, de que la iniciativa era simpática y de que los que la solicitaban, encaraban el asunto bajo un aspecto interesante en toda su faz deportiva. Debió ser un buen abogado de la causa, porque el fútbol hizo su entrada triunfal más o menos en 1895, creándose algunos cuadros de "amateurs" que jugaban en un terreno baldío que había entre las calles 48 y 49, y 115 y 116 o sea donde hoy se levanta el hermoso edificio del Colegio Nacional. Esa fue la primera cancha del Club de Gimnasia y Esgrima. Pero dentro de la institución no fue nunca simpática esta "rama nueva" injertada en el club y los muchachos que se iniciaron encontraron una resistencia pasiva en casi todos los dirigentes, que no bastó a quebrar la buena voluntad de Guido Lavalle y algunos dirigentes que simpatizaban con ci popular deporte. Lo cierto es que en 1904 fue disuelta la sección fútbol a raíz de que los mejores jugadores del club se apartaron de la institución, quejosos de no encontrar apoyo y separándose del Club de Gimnasia y Esgrima, donde había hecho sus primeras armas, fundaron una nueva institución deportiva llamada Club de Estudiantes de La Plata, de cuya interesante historia nos hemos ocupado en el número anterior de CARAS Y CARETAS, haciendo resaltar que su origen se debió a que los futbolistas del Club de Gimnasia y Esgrima se separaron de aquel club dando vida en 1905 al de Estudiantes.

Pero el hombre propone y… Dios dispone
SI bien nada se había hablado en la primera época del fútbol al crearse el club, y en su carta orgánica nada decía de este deporte, un párrafo hay, sin embargo, que escribieron los fundadores y que dice así, al reseñar los propósitos que guiaban a los hombres que le dieron vida: propender al espíritu de la nacionalidad, a la generalización de la práctica de los ejercicios físicos con la aplicación de los deportes conocidos; a formar del mismo un centro social de cultura intelectual, a la creación de una biblioteca, y a premiar todos aquellos actos de abnegación en defensa de nuestros semejantes. Aquellas dos palabras "deportes conocidos" era, el salvavidas al que se agarraban los náufragos del fútbol, para mantenerse a flote después de la supresión del popular juego y la renuncia de sus más entusiastas cultores. Aquellos hombres que fundaron esta gloriosa institución, tenían sin duda una clara comprensión del momento y una gran intuición del futuro. Si bien es cierto que en el año 1887, el fútbol no era "deporte conocido", no era posible aferrarse a esa teoría para eliminarlo, cuando más tarde se convertía en el deporte "más conocido", y así fue que el Club Gimnasia y Esgrima, fundado sin que nadie pensara para nada en el fútbol, y más bien tuviera este deporte en la institución su mal "cuarto de hora" de algunos años, ha tenido en el fútbol la base sobre la que ha determinado su extraordinario desarrollo, y a él debe su florecimiento, su riqueza, su engrandecimiento y sus actuales comodidades y nombradía. Los hombres de la primera hora no tendrían para nada que corregir los primeros estatutos de la institución, pues de acuerdo con lo que ellos escribieron, con intuición del futuro deportivo del país, el club cultiva los ejercicios físicos con la aplicación de los deportes conocidos... ¿Y cómo se operó este milagro? Una nueva "pelotera", como vulgarmente se dice. Los jugadores más destacados de aquel club Estudiantes de La Plata, diez años después de marcharse de Gimnasia y Esgrima, volvieron a disgustarse y regresaron a la "cuna materna" arrastrando tras sí al club que en aquella época se llamaba Club Independencia y cuyos jugadores resolvieron unirse a los que se "abrían" de Estudiantes y reorganizar con éstos, pero ya con carácter formal y protegidos ampliamente por las nuevas comisiones directivas, el fútbol en el Club de Gimnasia y Esgrima.

... y el fútbol vuelve a Gimnasia y Esgrima
LA acogida de aquellos entusiastas futbolistas fue triunfal. En 1915 estaba el fútbol en la iniciación de su mejor época de entusiasmo en todos los clubs porteños, y el plantel de jugadores que se congregó en Gimnasia y Esgrima, era de lo mejor. Entre otros fueron de Estudiantes e Independencia: Heliodoro Negri, Roberto Felices, Manuel Álvarez, H. Baserico, Emilio Fernández, Edmundo Ferreyroa, D. Bernasconi, Bottaro, J. Iglesias, H. Sancet y R. Naón. Ese año, entraba triunfalmente en el fútbol Gimnasia y Esgrima, pues su cuadro formado por E. Fernández, D. Bernasconi, J. Iglesias, H. Negri, R. Naón, E. Ferreyroa, A. Gismano, A. Bottaro, P. Schiaffino, E. Guriciaga y M. Alvarez, cuya fotografía ilustra esta crónica, en las páginas centrales de la revista, obtenida su ascenso a primera división y conquistaba para el club las copas de Honor, Campeonato y Competencia. No es posible olvidar la actuación que para esta gloriosa campaña del primer año de fútbol tuvieron también S. Galessio, L. Baserico, R. Gascón, M. Detoé, I. Bulla, J. Torres Amaral, R. Felices y H. Sancet.

Los grandes jugadores que ha tenido este club.
A partir de esta fecha triunfal para el club, el fútbol absorbió la atención de la institución y puede decirse que a sus éxitos debe la fama que en el deporte tiene el club de Gimnasia y Esgrima. De la lista interminable de grandes jugadores que desfilaron por sus cuadros merecen recordarse además de los ya nombrados de la "primera hora" Felipe Scarponi, H. Palenzona, los hermanos Caldera, Ismael Morgada, Gutiérrez Plumer, Gallardo, Roberto Bacchi, Isidro Zoroza, Anibal García, Miguel Curell, el gran wing que en 1911 se iniciara en el club Peñarol de la Ensenada, y en 1913 pasara a jugar al Club Ensenada, para ingresar en Gimnasia y Esgrima en 1918, ítalo Bardi, Salvarredi, y Felipe Scarponi el gran arquero "Mens sana" que se inició en 1916 en el Club General Belgrano, con Bastons, Alustiza, Palenzona, todos "taitas" de su época en Gimnasia y Esgrima. Por aquel entonces ya jugaban en una cancha del Bosque, frente a la que actualmente posee el club, luego se jugó en un amplio campo limitado por las calles 12, 13, 71 y 72, en lo que es ahora cancha del Club Gutenberg, y en esas modestas canchas, todos los nombrados dieron al club el gran prestigio de que hoy goza.

Los "Mens sana" dan la vuelta al mundo 
Los triunfales colores del fútbol argentino fueron en cierta oportunidad paseados por los estadios de Europa con éxito sostenido y con satisfactorios resultados deportivos por un selecto cuadro de "Mens sana". Los jugadores del Club Gimnasia y Esgrima de La Plata tomaron un día el "piróscafo" y se fueron a recorrer tierras y a meter goles en varias partes del mundo. Fué iniciador de esta gira, el señor Adolfo Doce, que propuso el viaje a la comisión directiva del club, la que después de estudiar la propuesta, la aceptó y el 8 de diciembre de 1930 se inició la gira, que terminó el 30 de abril de 1931. La delegación fué así formada: presidente, señor Mario L. Sureda; director técnico, señor Alfonso Doce; entrenador y masajista: señor Rafael Lafuente; jugadores: Felipe Scarponi, Evaristo Delovo, Julio C. Di Giano, Vicente Ruscitti, José M. Minella, Antonio Belli, Miguel Curell, Jesús Díaz, Arturo Naón, Juan C. González, Ismael Morgada (capitán), Juan Bottaso (Argentino de Quilmes), Osear Tarrío (San Lorenzo de Almagro), Pedro J. Chalú (Ferrocarril Oeste), Silvestre Conti (Nacional, de Rosario), Leonardo Sandoval (Quilmes), Juan J. Arrillega (Quilmes), Atilio Demaría (Estudiantil Porteño). Los jugadores argentinos recorrieron el Brasil, Portugal, España, Francia, Alemania, Checoeslovaquia, Austria e Italia. Mario L. Sureda, delegado en la actualidad del Club de Gimnasia y Esgrima ante el Consejo Directivo de la Asociación del Foot-ball Argentino, presidió, como hemos dicho, la delegación y aun conserva fresco el recuerdo de la gira por más de 27 ciudades de Europa, contando entre ellas, Río de Janeiro y San Pablo en Brasil, donde se jugaron los primeros partidos con equipos combinados cariocas y paulistanos. Se jugaron, nos decía Sureda, más de treinta "matchs", con resultado halagüeño, ya que trajeron de la gira, los "Mens sana", más triunfos que derrotas, no obstante las dificultades de todo orden con que tropezaron durante los cinco meses de viaje. Primero teniendo que jugar en el cuadrilátero de Río y en el de San Pablo, con un calor tropical, para jugar a los pocos días en los bellos días de primavera que les tocaron en Canarias y Las Palmas, pero debiendo aguantar el frío que más tarde les esperaba en Madrid, París y en el centro de Europa, donde nuestros muchachos debieron medirse con sus rivales de Munich, Praga, Leipzig, Chemnitz, Francfort, Bremen, Berlín y Viena en muchas oportunidades en "fields" cubiertos de nieve. Las jornadas fueron, deportivamente, en muchos puntos de éxito extraordinario para los jugadores argentinos, que llevaban la representación del club platense. Por ejemplo, en Munich, donde tuvieron que medirse con el cuadro seleccionado de Sportierein Munich 1860, vencieron a los locales por 4 a 0, y en Praga derrotaron al célebre Sparta por 3 a 1, acreditándose en esa forma un triunfo extraordinario, pues es conocida la tradición de invulnerables que tienen esos jugadores del centro de Europa.

Y el club que no quería tener fútbol debe su vida al fútbol
TOTAL, que el club que cinco años después de la fundación de La Plata se fundó, sin que los aristocráticos socios fundadores pensaran ni quisieran incluir entre los deportes del club, el popular juego del fútbol debe sin duda alguna, su grandeza actual y su desarrollo, al fútbol, que por una verdadera ironía del destino, es el que ha proporcionado dinero en abundancia y recursos suficientes para que pudieran desenvolverse con éxito la esgrima y el gimnasio que dieron origen a la institución. Hoy el Club Gimnasia y Esgrima de La Plata es una importantísima institución deportiva que tiene un local central en el que a más de un hermoso gimnasio dotado de los más modernos aparatos, posee una cancha de pelota cerrada, sala de esgrima y cómodas dependencias para sus asociados y en el hermoso local del bosque, a más del gran estadio con una capacidad de treinta mil personas, pileta de natación para grandes y chicos, courts de tenis, pista de patinaje, cancha de basquetbol, baños, etc. Los "Mens sana" han progresado en los cuarenta años de vida en proporción insospechada y a su progreso prestaron su evidente cooperación las comisiones directivas que presidieron: Saturnino Perdriel, José A. Lagos, Ulises Villalobos, Adolfo Montier, Edelmiro Palacios, Miguel Gutiérrez, doctor César Ameghino, doctor Ricardo Guido Lavalle, ingeniero Benjamín Sal, Horacio J. Aráuz, Diego J. Arana, Julio J. Paz, doctor Emiliano de la Puente, doctor G. O'Reilly, doctor Horacio A. Casco, Esc. Alberto González, doctor Adolfo A. Rivarola, doctor Augusto Liliedal, Juan C. Zerillo, ingeniero Ángel Marmonti, doctor Plácido Seara. En la actualidad rige los destinos del Club de Gimnasia y Esgrima de La Plata la siguiente comisión directiva que preside el conocido industrial Juan T. Erbiti. Secretario, doctor Ángel Zaro; secretario de actas, Jaime Vinales; tesorero, Guillermo O. Mongan; protesorero, Laureano Durán, y vocales, Juan V. Apella, Roberto Campodónico, doctor Américo V. Daneri, doctor Julio Fidanza, doctor Clemente G. Lastra, Osvaldo Lanteri Cravetti y Abel Monteagudo Tejedor, comisión que en la actualidad lucha sin tregua por la gloria del club.§