La insersión urbana del nuevo White Hart Lane

 El artículo en inglés de David Conn se publicó el 1º de noviembre de 2018 en The Guardian: https://www.theguardian.com/football/2018/nov/01/tottenham-hotspur-stadium-redevelopment-haringey-neighbours?CMP=share_btn_tw

A la sombra del nuevo estadio de los Spurs, los residentes locales temen por su futuro. El club y el Consejo municipal mantienen visiones diferentes sobre el desarrollo del barrio, y los retrasos en los trabajos dejan en un limbo a las personas y los comercios.
Vista desde Tottenham High Road del nuevo estadio de White Hart Lane de 62.000 asientos. Hasta el momento costó £ 850 millones y los Spurs auguran inaugurarlo a principios de 2019. Fotografía: Martin Godwin / Guardian
A pesar de los retrasos y los aumentos de costos, el nuevo estadio del Tottenham Hotspur ya presenta una silueta formidable en el antiguo emplazamiento de White Hart Lane. Cuadrillas de obreros con cascos de seguridad trabajan duro para establecer la nueva fecha de apertura. Los planes de los Spurs para recuperar los £ 850 millones invertidos en la construcción incluyen los tickets de ingreso al estadio de 62.062 asientos y todos sus programas de hospitalidad, dos partidos de la NFL y seis conciertos de rock al año, el centro de visitantes "Tottenham Experience" con la tienda de fútbol más grande de Europa, un hotel con 180 camas y 579 departamentos en cuatro edificios para los que el club ya obtuvo el permiso de construcción.

Ya se completó una parte del plan de desarrollo de la zona, que los Spurs ayudaron a financiar de acuerdo con lo acordado con el distrito londinense de Haringey. Se trata de un área urbana de graves privaciones y que fue alcanzada por los disturbios de 2011. Los nuevos edificios incluyen un supermercado Sainsbury's, 256 casas de precios accesibles, y nuevos colegios secundario y primario.

Enfrente de toda esta nueva edificación se encuentra Tottenham High Road oeste, un barrio densamente poblado de tiendas, pequeñas fábricas y la sede en Love Lane del Consejo municipal, que plantea una situación de total enfrentamiento. Los Spurs manifiestan su completo desacuerdo con el plan de desarrollo propuesto por el Consejo de Haringey. Las pequeñas empresas denuncian que serán expulsadas de la zona, y los residentes miran al futuro con sumo temor debido a la grave escasez de viviendas en el municipio. Hay 10.000 hogares en lista de espera y 3.000 familias que hoy viven en alojamiento temporario.

The Guardian reveló que en 2013 los Spurs compraron varias propiedades en la zona oeste de High Road, como fábricas, tiendas e incluso departamentos repartidos por allí. Las propiedades fueron transferidas a la compañía TH Property Ltd. registrada en las Bahamas, un paraíso fiscal en el que basa sus operaciones Joe Lewis, el accionista mayoritario del club. Los dueños de garajes y otros negocios pequeños dijeron que enfrentaban el riesgo de una venta compulsiva (CPO, Compulsary Purchase Orders) si no se mudaban para facilitar el plan maestro de desarrollo comercial y residencial. Todos suponen que los Spurs proyectan ganar fortunas en esta reurbanización.

En 2012 —luego de anunciar que el club permanecería en Tottenham al no haber logrado vencer a West Ham en su puja por el Estadio Olímpico— el presidente del club, Daniel Levy, enfatizó la imperiosa necesidad de un plan de desarrollo urbano en una declaración conjunta con el entonces líder del Consejo de Haringey. Desde ese momento, y a pesar del memorando de entendimiento que acordaron para desarrollar el área en conjunto, los Spurs y el Consejo han desarrollado visiones muy diferentes sobre la reurbanización. Esto enfurece a los Spurs, que argumentan que el Consejo se alejó del memorando de entendimiento en el que se declaraba que el club tomaría la iniciativa. Al preguntársele a un portavoz del Consejo, no estuvo en desacuerdo, pero señaló que el memorando no es legalmente vinculante y que el Consejo es libre de modificar sus decisiones.

El Consejo dice que su plan se nutrió de una consulta con los residentes para lograr “beneficios de mayor alcance” para la comunidad local: 2.500 casas (incluidas 191 municipales y 750 clasificadas de precio accesible), nuevas tiendas, espacios comerciales y para actividades recreativas, un nuevo parque público, una plaza y una biblioteca moderna. Los Spurs argumentan que el esquema no es ambicioso, y compara desfavorablemente con los prestigiosos desarrollos en Kings Cross.

Un portavoz de los Spurs le dijo a The Guardian que "el club considera que el plan para High Road oeste (basado en una nueva biblioteca y un centro comunitario) podría no alcanzar el objetivo del Consejo de establecer un nuevo destino de recreación de primera categoría en Londres y no brindará la escala o calidad de regeneración del área que los residentes merecen".

El Consejo rechaza esa evaluación y responde que “las propuestas para High Road oeste reflejan las aspiraciones de quienes viven en la zona. El Consejo no considera que esta situación defina un esquema poco ambicioso”.

En 2015, y contra la oposición fundamental de los Spurs, el Consejo tomó la decisión de no confiar la reurbanización al club y abrió un concurso para seleccionar un desarrollador que ganó Lendlease en septiembre de 2017. Desde entonces, no pasó mucho. Este impasse agravó la situación de las pequeñas empresas y residentes de las 297 casas de Love Lane incluidas en la demolición. La indignación generalizada surgió del plan maestro original, que preveía demoler todo el patrimonio edilicio del Consejo, para abrir un camino desde la estación de tren de White Hart Lane hasta el nuevo estadio de los Spurs. Los inquilinos originales fueron mudados. Pero el Consejo aprovechó para traer nuevas familias que se encontraban en alojamientos temporarios, una mejora precaria para estos sin techo. Paul Burnham, del movimiento de defensa de casas municipales de Haringey, cree que esta es la mayor cantidad de personas jamás mudadas a viviendas programadas para demolición.
Vista aérea de los alrededores de White Hart Lane en octubre de 2018. Love Lane está en la parte superior de la imagen, separada del estadio por Tottenham High Road. Fotografía: David Goddard / Getty Images
Mark Panton, académico del Colegio Birkbeck, que recopiló la crónica de esta reurbanización y produjo junto a Amanda Lillywhite el libro de fotos "¿El caballo de Troya de Tottenham?", recibió a residentes de Love Lane durante el verano. "Había una real sensación de miedo", dice Panton, "la gente ve cómo avanza el estadio, pero sus casas serán demolidas y no tienen idea de qué les deparará el futuro".

A pesar del cambio de planes del Consejo en 2015, Tottenham Hotspur y otras compañías de Joe Lewis compraron más propiedades en High Road oeste. En abril de 2016, una compañía llamada Renland Ltd. compró por £ 4,05 millones una pequeña fábrica conocida como Goods Yard. Según el Registro de la Propiedad, Renland es una compañía de los Spurs y sus únicos dos directores son Levy y el director financiero del club, Matthew Collecott. La empresa es propiedad de Tottenham Developments Ltd., que no está registrada en el Reino Unido. El club no confirmó dónde está registrada esta compañía, pero dice que las transferencias de a compañías con sede en Bahamas no se realizan para evitar impuestos sobre ganancias de capital obtenidas en el desarrollo de estos sitios en el Reino Unido.

En abril de 2018, una empresa llamada Stanhope Tottenham Ltd. compró otro sitio grande, ubicado en el número 867-869 de High Road oeste, que ocupaba el supermercado B&M. El precio fue de £ 14.55 millones. Stanhope Tottenham es una sociedad entre el desarrollador Stanhope y los Spurs. Levy y Collecott son directores junto con otros tres ejecutivos de Stanhope. Levy y Joe Lewis, quien fija su domicilio en Nassau, Bahamas, son accionistas sustanciales.

Estas nuevas compras de propiedades demuestran que los Spurs están interesados en el desarrollo urbano y sus ganancias. Una fuente del club dijo que no creen que el Consejo pueda comprar compulsivamente las propiedades de los Spurs, pues el club argumentará que su intención es desarrollar el plan maestro de la forma prevista. Como el desarrollo está estancado, los Spurs incluso presentaron su propia solicitud para construir 330 casas, tiendas minoristas y lugares de ocio en Goods Yard, que rivaliza con los planes de Lendlease. Hasta agosto el Consejo aún no había respondido, por lo que los Spurs apelaron esta inacción ante la Inspección de Planificación. El portavoz de los Spurs definió la posición: “el club permanece abierto a todo tipo de asociación, para trabajar junto a Lendlease u otro desarrollador, y la nueva administración del Consejo, y está decidido a garantizar que los beneficios de que surjan la reurbanización se maximicen para provecho del área local."

El Consejo dice que sus planes están sujetos a más consultas y que cambiarán. Su portavoz expresó específicamente "el patrimonio de Love Lane no se demolerá para crear un camino al estadio, y en el sitio se construirán nuevas viviendas municipales para alquilar a precios fijado por el Consejo". El Consejo también dice que tiene como objetivo reubicar algunos negocios en el nuevo desarrollo y ayudar a otros a mudarse si esto no es práctico. Siguiendo las nuevas reglas introducidas por el alcalde de Londres, Sadiq Khan, el Consejo debe consultar a los residentes sobre sus planes. Este voto se realizará en la primavera de 2019.

Sin embargo, los años de demora y disputas han causado que muchos residentes y empresas teman perder todo de manera catastrófica.

Un residente de Love Lane, Tash Bonner, de 24 años, artista de grabación y estudiante del negocio de la música en la universidad BIMM, ha vivido en un departamento de Love Lane durante cuatro años con su madre y su hermana menor, de 19 años. Terminaron sin hogar, dijo, después de vivir en una casa alquilada durante 11 años, luego en tres direcciones temporales diferentes, antes de aterrizar en Love Lane. "Es complicado, incierto y estresante", dijo Bonner, "siempre vivimos por aquí, pero me preocupa mudarme de Londres. Esto hace la vida mucho más difícil y es muy estresante para mi mamá. Hay tanta incertidumbre".

Faruk Tepeyurt, quien dirige Solmaz, una empresa de diseño de interiores, y representa a los negocios ubicados en el parque industrial Peacock, cree que les ofrecerán muy poco dinero para mudarse porque el plan maestro designa el sitio como un espacio verde y no como lucrativos departamentos residenciales.

El sitio de B&M limita con DW General Wood Machinists, una próspera carpintería familiar de más de 70 años de antigüedad que emplea a 20 personas. Su propietario, Brian Dossett, dijo que se sabe que los Spurs compran tierras en la zona, pero no entiende bien por qué, pues todos suponen que los Spurs estarán sujetos a la misma amenaza de compras compulsivas del Consejo que afectan a las pequeñas empresas. “Estos últimos años fueron muy estresantes”, dijo Dossett, mientras se enfrenta a ser removido del área sin un sitio de reemplazo identificado “¿Qué más puedes ser esto que el limbo?”
 El sitio de la nueva cancha del Tottenham con el desarrollo en marcha en 2013. El anuncio promete un "área vibrante los 365 días del año", nuevos empleos, nuevas tiendas, nuevas viviendas". Foto: Jonny Weeks / Guardian
El reverendo Paul Nicolson, un veterano activista contra la pobreza que vive en el área, informó al relator de la ONU sobre pobreza extrema y derechos humanos la situación de las familias que viven en Love Lane, y describió que la experiencia de vivir en un alojamiento temporario en Londres "aplasta la vida".

El Hotspur Football Club fue establecido en 1882 por jóvenes de dos escuelas locales, quienes celebraron su reunión inaugural bajo un farol del Tottenham High Road. El flamante nuevo estadio del siglo XXI de la Premier League será un monumento al fenomenal crecimiento de este deporte desde aquellos modestos comienzos, mientras que en esa misma High Road se condensan las sorprendentes desigualdades y complejidades de la Londres moderna.§